Aproximadamente 537 millones de personas en todo el mundo viven con diabetes.

Alarmantemente ese número está creciendo.

La diabetes tipo 1, se caracteriza específicamente cuando el sistema inmunológico ataca y destruye las células beta en el páncreas que producen insulina. Estas células regulan los niveles de glucosa en la sangre que el cuerpo necesita para obtener energía. El azúcar en la sangre continuará aumentando sin insulina, por lo que los diabéticos tipo 1 deben inyectarse insulina por el resto de sus vidas debido al hecho de que no existe una cura conocida para la diabetes.

Pero en los últimos 20 años, avances significativos en la investigación y terapias con células madre han revelado métodos prometedores para crear nuevas células productoras de insulina, lo que significa que esta podría ser la cura para la diabetes tipo 1.

No hay efectos secundarios conocidos de la terapia con células madre hasta la fecha. Por el contrario, los pacientes con terapia con células madre han experimentado resultados positivos y algunos incluso han sorprendido a la comunidad de terapia con células madre. Después de 150 días, algunos pacientes pueden reducir la cantidad de insulina que inyecta en un 90+%.

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